No se dictó medida de aseguramiento contra Yara Malo, procesada por extorsión

La Juez 72 con función de Control de Garantías no dictó medida de aseguramiento contra Yara Milena Malo Benítez, hija del magistrado Gustavo Malo, investigado por el denominado ‘Cartel de la Toga’.

De acuerdo con la funcionario judicial, “esto no es más que una pelea de amigas, por lo que no hay suficientes argumentos para privar de la libertad a la mujer imputada”.

Según la Fiscalía General de la Nación Yara Malo, “es un peligro para la sociedad, y puede inferir en el debido proceso por su cercanía con la justicia”.

Yara Malo se encuentra en juicio por la investigación que se adelanta en su contra por presuntamente solicitar dineros a Angélica Padilla, fiscal adscrita a la seccional Bogotá, a cambio de conservar su puesto.

De acuerdo con el fiscal Daniel Cardona, Padilla inició su proceso de ingreso a la Fiscalía General “para lo cual usted (Yara Malo), remitió una recomendación debido a la cercanía de ambas (...) se conocen desde la infancia”.

Según Cardona, Malo Benítez se habría “aprovechado de su condición de hija del magistrado de la Corte Suprema de Justicia, Gustavo Malo, y en virtud de la confianza existente con Angélica Padilla, impulsó el nombramiento de esta al interior de la Fiscalía General de la Nación”.

El fiscal del caso aseguró que, así como puso en un puesto Público a Padilla, “también lo hizo con una compañera de la fiscal extorsionada, más específicamente a Diana Jaramillo”.

“Usted (Yara Malo) le señaló en múltiples ocasiones a Angélica María Padilla que como consecuencia de esa gestión debería garantizarle entre el 20 % y el 30% del salario de ella, así como el de Diana Jaramillo”, dijo el fiscal.

Según la investigación de la Fiscalía, “desde finales de julio de 2016 hasta diciembre del mismo año, usted (Yara Malo) recibió pagos por $4.500.000 en relación a estos hechos”.

Así mismo, señaló que la hoy imputada ejercía presión sobre Padilla para que la misma le cancelara los dineros exigidos. “Usted se aprovechaba de su poder y le aseguró que si no le pagaba se encargaría de sacarla de la entidad o se encargaba de que la mandaran al Chocó, donde hay guerrilla”, dijo la Fiscalía.

La mujer no aceptó el delito de extorsión que le imputó el ente acusador.