Hoy se realiza el sepelio colectivo de los niños de Fundación, Magdalena

Los cuerpos de los 33 menores fallecidos deben llegar a mitad de la mañana a Fundación, para ser despedidos por sus familiares y amigos.

En la mañana de este miércoles llegará a Fundación, Magdalena, la caravana con los 33 cuerpos de los niños que murieron luego de que se incendiara el bus en el que eran transportados.La entrega de los cuerpos iniciará hacia las 6:00 a.m., con un acto religioso en las dependencia de Medicina Legal en Barranquilla. Luego saldrá la caravana con los féretros hacia Fundació, donde se estarán haciendo, primero, las honras fúnebres y luego el sepelio colectivo.Se estima que el viaje tenga una duración de tres horas y pasadas las 9:00 a.m. se llegue a la Institución Educativa Departamental Fundación, donde se llevarán a cabo las honras fúnebres, pues muchos de los niños fallecidos en la tragedia estudiaban allí. Se espera que a esa hora también esté presente en Fundación el presidente Juan Manuel Santos, quien estará acompañando a los familiares durante el sepelio colectivo. Serán 33 los ataúdes que se entregarán este miércoles, porque a los 31 cuerpos incinerados se suman el de Dianis Lorena Tapias García, quien falleció el lunes en la madrugada, al no sobrevivir a las quemaduras de segundo y tercer grado que sufrió en el 35 % de su superficie corporal; el 23 de mayo falleció también Antonio José Pavón Mozo, quien tenía quemaduras en el 90 % del cuerpo. Pide que lo dejen asistir al sepelio Manuel Ibarra, asesor espiritual de la Iglesia Pentecostal Unida de Colombia, quien se encuentra recluido en la Cárcel Modelo de Barranquilla, solicitó a las autoridades que le den permiso para estar presente en el entierro de su hija, que también falleció incinerada en la tragedia del pasado 18 de mayo. Ibarra y el conductor del vehículo, Jaime Ramos, se encuentran recluidos en el mencionado centro carcelario, luego de que un Juez con Control de Garantías los enviara a la cárcel por su presunta responsabilidad en el hecho. El primero, por haberlo contratado sin comprobar el estado del carro, y el segundo por no tener la precaución de bajar a los niños al momento en que se presentaba la falla mecánica.