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Capitán Jaime Hernández, presidente de la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles (Acdac). | Foto: Colprensa

AVIANCA

"Hay una campaña de propaganda negra contra los pilotos": presidente de Acdac

El capitán Jaime Hernández habla sobre el origen del conflicto con Avianca, que completa catorce días. Este miércoles se realizará audiencia en Bogotá.

2 de octubre de 2017 Por: Francy Elena Chagüendo / Reportera de El País

Catorce días completa este martes el paro de pilotos de Avianca y no se vislumbra una solución a corto plazo que permita superar el caos del transporte aéreo en el país.

El capitán Jaime Hernández, presidente de la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles (Acdac), se ratifica en que la huelga es legal y que no aceptan el tribunal de arbitramento convocado por el Gobierno Nacional.

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En entrevista con El País el capitán Hernández dice que la situación que viven los pilotos de Avianca también la sufren los trabajadores de otras aerolíneas y que lo que se ha querido es acabar con la agremiación. Pide excusas a los colombianos y confirma que siguen esperando que Avianca se siente de nuevo a la mesa de diálogo.

¿Cuál es la realidad laboral en Avianca, desde cuándo viene el conflicto con la aerolínea?

Viene desde hace muchos años. Avianca inició una discriminación desde el año 2005, lo que hizo que en ese momento el 60 % de los pilotos afiliados a la Acdac se retiraran de la asociación para poder acceder a aumentos del salario.

La empresa hizo un pacto colectivo (acuerdo firmado entre la compañía y los empleados no sindicalizados) y les incrementó el salario nuevamente solo a los que no estaban sindicalizados y se inició una discriminación que duró varios años. Esto terminó cuando la Corte Constitucional legisló sobre el tema y exigió igualdad.

¿Qué dijo la Corte en ese momento?

La Corte dijo que Avianca actuó de mala fe y que fue claramente una discriminación aumentar el salario solo a los pilotos no sindicalizados y exigirles a los agremiados adherirse al pacto colectivo. Esto también afectó a los auxiliares de vuelo.

Ahora, en marzo pasado, Avianca negocia su pacto colectivo y lo que hizo fue copiar la convención colectiva (que se hace entre la empresa y los sindicatos) y volverla pacto, solo para que los pilotos que están fuera de Acdac no paguen la cuota por beneficio convencional y, adicional a eso, dicen que por igualdad nos quitarían los beneficios obtenidos en la convención colectiva, lo cual es un delito y sigue siendo ilegal.

¿Cómo funciona esto en la práctica?

Por ejemplo, en el pacto colectivo se dice que los trabajadores tienen derecho a un domingo de descanso al mes y luego dicen que si nos pagan cinco pesos ya no tenemos derecho a ese día. Avianca, por el tema de igualdad, les dice a los pilotos sindicalizados, que tampoco tenemos derecho a ese domingo si nos pagan esos cinco pesos. De esa forma nos modifican la convención colectiva.

En esta negociación fue lo mismo, nos sentamos y nos presentan una propuesta que incorpora lo arreglado en el pacto colectivo que es el incremento salarial y una cantidad de cosas que no se pueden hacer, porque es la suplantación de una negociación a través del pacto colectivo y ¿quien negocia el pacto?, los pilotos administrativos, instructores, chequeadores, etc. Realmente lo que hacen es un autopliego y autonegociación. Las propuestas que nos trajo Avianca eran inmodificables, absolutas e integrales.

El Tribunal Superior de Bogotá citó
a una audiencia mañana miércoles a los pilotos que deben argumentar la legalidad del paro.

¿En cuántos tribunales de arbitramento han participado ustedes?

En los últimos 4 años van 3 tribunales de arbitramento y por falta de garantías hemos tenido que retirar el pliego. Ahora el Gobierno cita un nuevo tribunal de forma ilegal, porque no se esperó a que terminara la huelga.

Hay que tener en cuenta que esta problemática no es solo de Avianca, lo mismo pasa con LAN, que también discrimina, por ejemplo, le subió $4 millones al piloto que se saliera de la Asociación y $2 millones al copiloto. De 97 pilotos que teníamos de esa aerolínea solamente quedaron 23. Copa y Avianca hicieron lo mismo. A los tres les ganamos jurídicamente, pero la afectación para Acdac se dio.

En Avianca el trato humillante ha hecho que los pilotos se queden y se mantengan en huelga, pero es una política global de todas las empresas del sector.

¿Qué pasa en las otras aerolíneas?

Hemos tenido tribunal de arbitramento en casi todas las aerolíneas y ninguna quiere negociar y lo que hacen son pactos colectivos para que la gente se salga del sindicato.

Por eso, la Asociación de Transporte Aéreo Colombiano (Atac), que agremia a las aerolíneas, mandó una carta al Gobierno Nacional pidiendo medidas como el tribunal de arbitramento. Por ejemplo, LAN paga la mitad a los pilotos de lo que paga la misma empresa en Chile y Copa también paga por debajo de lo que gana un piloto panameño.

Precisamente la Atac dice que los pilotos de Avianca ganan entre $20 millones y $30 millones al mes y laboran solo entre 16 y 17 días...


Eso no es cierto, si me traen esa propuesta con esos salarios yo le firmo. Lo que han hecho es incendiar a la opinión pública acudiendo a lo peor y lo malo que podemos tener los seres humanos, se generó una campaña de propaganda negra espantosa que hoy en día la opinión pública le está censurando a Avianca.

Entonces, ¿cuánto ganan?

El piloto más antiguo, con 40 años vinculados al sector, tiene un promedio de US$7000 y el copiloto recién ingresado está en entre US$2000 ó US$2500. En otros países, un piloto del mismo avión, de la misma empresa se gana US$13.000 y un copiloto nuevo devenga unos US$6000. La discriminación es clara hacia el profesional colombiano.

Este lunes Avianca operó 157 vuelos y canceló 204. Se transportaron 20.073 pasajeros y otros 14.589 no pudieron viajar.

¿Hasta dónde están dispuestos a llegar ustedes en esta huelga?

Los pilotos seguimos sentados en la mesa. Avianca se paró y se fue y esa es una de las reflexiones que hay que hacer. El dueño de Avianca es propietario del 50 % de la aviación colombiana, tiene una huelga en su empresa, por las políticas laborales no quiere negociar y se fue del país.
Hay que replantear como es el tema de la seguridad nacional y la soberanía ante el poder que puede adquirir una persona extranjera que con esta política está dejando al país parado.

Es como un partido de fútbol, el niño que es el dueño del balón se puso bravo, cogió el balón y se fue y los dejó a todos en la cancha de fútbol sin poder hacer nada.

¿Qué decirles a los colombianos afectados?


Pedimos disculpas por la afectación que puedan tener en sus planes de viaje, pero estamos realizando una huelga legal, a la que tenemos derecho, a la que la compañía nos llevó y que se ha extendido por la negativa de la empresa a negociar. Lamentamos lo que está pasando, pero estamos sentados en la mesa y dispuestos a negociar.

¿Hasta dónde cederán para que se levante la huelga?

Avianca realizó una propuesta, que luego retiró, pero basados en ese documento nosotros hicimos unas modificaciones y una rectificaciones, porque había unos puntos que estaban preacordados y que ellos modificaron, y con esa base y con puntos que no se alcanzaron a discutir, se presentó otra propuesta a la compañía que está en sus manos y estamos pendientes de negociarla.

¿Qué pasará en la audiencia que se realizará mañana para definir la legalidad del paro?


Iremos a defender la legalidad de la huelga que Avianca ataca, y obvio las otras aerolíneas, por las razones ya expuestas. La Organización Internacional del Trabajo señaló que los pilotos no ejercemos un trabajo público esencial. Al estar parados solo la mitad de los pilotos de Avianca no se afecta el servicio. El 75 % de la aviación del país está funcionando.

El dueño de Avianca dice que el acuerdo que ustedes proponen le costaría US$200 millones a la empresa....

No es cierta la cifra, lo que nos separa del acuerdo son US$8,7 millones en los próximos dos años, lo cual es irrisorio. La empresa ya perdió más de US$32 millones por esta huelga, lo que demuestra que es negligencia, falta de interés y se genera una crisis en el país para poder mantener su pacto colectivo vivo y desocupar la asociación.

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