Este viernes exhumarán el cuerpo del exministro Rodrigo Lara Bonilla

Con este procedimiento, se busca que los peritos forenses establezcan los detalles de la muerte del Exministro, como la trayectoria de las balas.

La Unidad de Análisis y Contexto de la Fiscalía, Dinac, llevará a cabo este viernes, 15 de abril, el proceso de exhumación de los restos del exministro de Justicia, Rodrigo Lara Bonilla.

Esto en el marco de una investigación que se adelanta para determinar los máximos responsables de la muerte del exfuncionario asesinado el 30 de abril de 1984.

A pesar de que ya han pasado más de 30 años desde el crimen, la investigación en la Fiscalía sigue vigente, pues fue un hecho considerado como crimen de lesa humanidad, por lo cual no prescribe.

Con este procedimiento, el ente acusador busca que los peritos forenses establezcan los detalles de la muerte del exministro, como la trayectoria de las balas para determinar si hace 31 años hubo personas involucradas, distintas a los sicarios que le dispararon cuando se dirigía a su casa en el norte de Bogotá.

“El objetivo de esta diligencia es esclarecer una posible responsabilidad de agentes del Estado, específicamente del esquema de seguridad, que pudo haber sido permeado por el narcotráfico o el paramilitarismo“, indicó el director de la Unidad de Análisis y Contexto de la Fiscalía, Juan Pablo Hinestrosa.

En el procedimiento se tiene prevista la presencia del fiscal General de la Nación (e) Jorge Perdomo, en la ciudad de Neiva, Huila.

La familia de Lara Bonilla ha denunciado en diferentes oportunidades que en este caso ha habido un esfuerzo sistemático por bloquear la verdad, además de posibles omisiones y maniobras de ocultamiento en la investigación por este crimen.

Para los familiares este hecho no solo tiene relación con el capo Pablo Escobar y los carteles de la droga, sino que detrás de la muerte del exministro había una organización que planeó el asesinato. Así las cosas, entre las razones de la Dinac para ejecutar la exhumación, se quiere establecer plenamente si en la escena del crimen hubo algún tipo de omisión o participación de agentes del Estado.