El pais
SUSCRÍBETE

El Gobierno tiene obligación de combatir a los ilegales, dicen analistas

Aunque las Farc se quejaron de los operativos que realiza el Ejército en su contra, analistas dicen que se trata solo de eso, una queja, porque el Estado está en la obligación constitucional de combatir a las fuerzas ilegales, a menos de que se firme un acuerdo de paz

20 de marzo de 2015 Por: Redacción de El País

Aunque las Farc se quejaron de los operativos que realiza el Ejército en su contra, analistas dicen que se trata solo de eso, una queja, porque el Estado está en la obligación constitucional de combatir a las fuerzas ilegales, a menos de que se firme un acuerdo de paz

El cumplimiento del cese al fuego unilateral decretado por las Farc en diciembre pasado estaría  en riesgo por las acciones militares del Ejército Nacional, según   la alerta  lanzada  ayer por la guerrilla, antes de iniciar el segundo día de conversaciones del ciclo 34 en La Habana, Cuba. 

En el comunicado leído  por el jefe negociador de las Farc ‘Iván Márquez’, se indicó que ese grupo ya ha tenido quince gestos unilaterales para  el desescalamiento del conflicto, mientras que el Gobierno “no avanza en ese sentido”.

Cuestionaron que las Fuerzas Militares, por orden presidencial, sigan saboteando con ataques “a mansalva” la tregua unilateral de las Farc y, que según ellos, se violenten los derechos humanos en momentos que se discute la garantía de no repetición para las víctimas.

Precisamente, ayer se conoció de un enfrentamiento en el que un militar de las fuerzas especiales resultó muerto y un indígena quedó herido durante una operación del Ejército en la vereda El Crucero en Corinto, Cauca.

El presidente Juan Manuel Santos había advertido el martes de la semana pasada que los bombardeos a campamentos de las Farc iban a cesar durante un mes, siempre y cuando las Farc cumpliera la tregua, pero que las operaciones terrestres se iban a mantener en todo el territorio.

El experto en Seguridad y Defensa, John Marulanda, recordó que el Gobierno tiene la obligación constitucional de combatir a las fuerzas ilegales a menos que estas decidan entregar las armas y rendirse o negociar la terminación del conflicto.  Así mismo, indicó que desde hace más de dos años la guerrilla aceptó negociar en medio de la guerra, por lo que “no hay motivo a la queja”.

“Creo que en estos momentos los diálogos están pasando por una crisis y queda patente en la salida de los generales de la mesa principal negociadora;  la creación del comité asesor para la paz; el anuncio de desminado; la suspensión de los bombardeos y la insistencia a que (Álvaro) Uribe esté de acuerdo con el proceso. Toda esta angustia es aprovechada por las Farc para presionar  más”, argumentó Marulanda.

Mientras que el politólogo Óscar Duque sostuvo que este juego “de gato y ratón” en muy normal en un proceso de paz como el que adelanta Colombia porque el Gobierno va a seguir en su deber de mantener las acciones militares hasta que se firme la paz y las Farc, mantendrán su lógica de la guerra mientras el Gobierno ceda.

“Este es un juego de gato y ratón, donde cada una de las partes seguirá en su intento por ganar mas favorabilidad en la opinión pública y cada uno hará sus espavientos”, indicó Duque.

Por su parte, el Frente Amplio por la Paz  se mostró preocupado por la advertencia de las Farc porque “el aumento de las acciones militares y la presencia paramilitar en algunas zonas del país”  podría llevar al fin de la tregua. A través de un comunicado expresó que las Farc sí han cumplido la decisión de cesar acciones terroristas.

Ayer, la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca, ACIN, y las organizaciones campesinas de la región, insistieron en la necesidad de acordar un cese al fuego bilateral para poner fin a las acciones militares que afectan directa e indirectamente a la población civil asentada en esa zona.

La propuestaAyer el jefe negociador de las Farc, Iván Márquez,  presentó la propuesta  que busca que se cree una comisión que acuda a los territorios donde se han presentado confrontaciones con la Fuerza Pública y se haga una búsqueda exhaustiva de los cuerpos de combatientes. La comisión,  según Márquez, podría ser conformada  por guerrilleros, militares y el Comité Internacional de la Cruz Roja, CICR, “para ir a esas zonas donde se produjeron esos combates a buscar los cuerpos”.Agregó que también   “hay muchos casos donde el Ejército no recoge a sus soldados caídos”.

AHORA EN Colombia