Consejos para comprar por internet de forma segura

Evite caer en la red de la publicidad engañosa con ofertas y paquetes turísticos que no cumplen lo que prometen.

La red de internet facilita mucho la vida moderna, es verdad. Pero en ese universo virtual también abundan los espejismos en los que caen viajeros incautos, desprevenidos e incluso, expertos.Los rótulos de oferta, promoción, outlet, descuento, entre otros, seducen a usuarios que anhelan un buen paquete de vacaciones o hasta un vuelo para asuntos de negocios. Pero al final, el destino ofrecido no era la tierra prometida por publicidad engañosa. O lo que parecía barato termina por salir más caro o los viajeros son víctimas de la letra menuda.La semana pasada, la Superintendencia de Industria y Comercio, SIC, sancionó a LAN Colombia, por lo que debió restituirle a un consumidor, $712.060, valor pagado por unos tiquetes aéreos comprados a través de la página web www.lan.co. El pasajero ejerció su derecho a retractarse de la compra dentro de los cinco días permitidos, pero la aerolínea no aceptó la reclamación.Otra sanción de la SIC al sitio Despegar.com (ver anexo) ponen sobre el ‘counter’ la necesidad de saber comprar tiquetes y paquetes turísticos por internet para que no se dañe el viaje.Cuando la página no es clara en las condiciones de la venta Jéssica Guerrero García y Angie Katherine Ramírez debían asistir a un evento en Bogotá en enero pasado. Reservaron unos pasajes a $91.000 ida y regreso Cali-Bogotá-Cali. La oferta decía que se pagaba por consignación a nombre de una razón social determinada.Así lo hicieron, pero al no recibir llamada ni ver cambio en su estado de reserva llamaron. La respuesta fue que habían perdido la reserva porque “nunca reportaron su consignación”. Jéssica reclamó, pero le dijeron que debía hacer otra reserva (para un día que ya no les servía) o esperar la devolución del dinero en 30 días. Ni en la página donde reservó, ni por correo electrónico ni por celular le informaron que debía avisar que ya había consignado el valor de los tiquetes, refiere una de las afectadas. “Después revisé otra vez la página por si había alguna advertencia que yo no hubiera leído, pero no había nada. Para mí eso es estafa”, dice Jéssica. Ella y su colega tuvieron que viajar en bus, con todos los gastos adicionales y molestias que ello implicó. Y van a instaurar la queja respectiva ante la Superintendencia de Industria y Comercio, SIC, ente que vigila y protege los derechos del consumidor.Caso similar al de Despegar.com, que en enero recibió sanción y multa por $12.320.000 (20 SMLMV) por ofrecer servicios turísticos en su página web con “la promesa incumplida” del “mejor precio garantizado”, que no correspondía a la realidad. Conducta tipificada como publicidad engañosa porque a medida que el cliente avanza en los pantallazos de la web, el precio va aumentando porque en el inicial no incluye los impuestos del país o del exterior, tasas, cargos, sobrecargos o tarifas que afectan el precio final.Reconozca una página seguraAl ingresar a una página para comprar pasajes o planes vacacionales, aprenda a distinguir una página segura de un sitio falso o montado solo para estafar.De acuerdo con Miguel José Navas, director de la especialización en seguridad informática de la Universidad Autónoma de Occidente, UAO, el ‘fishing’ es la técnica utilizada para la estafa virtual. Consiste en que el delincuente informático hace una copia idéntica de una página legal, con sus logos, colores corporativos y tipología tipográfica iguales a la original.El usuario, sin saberlo, ingresa a esta página apócrifa y cuando digita todas sus credenciales y claves de tarjetas de crédito, no lo hace para la entidad verdadera, sino para la página falsa creada por el estafador.Por ello, Navas afirma que lo más seguro es escribir la dirección sobre la barra para ello (URL) directamente.Si el sitio empieza por las letras https, es indicio de que es una página verdadera, porque ese es el protocolo para transferencia de hipertexto seguro. La letra ‘s’ significa que esa entidad ha pagado un servicio de seguridad informática.El espejismo virtualUn encuentro familiar de fin de año en una finca del Eje Cafetero se tornó en un aburrido e incómodo paseo. Aprovechando que todos tenían vacaciones en Navidad, el abuelo de los Gutiérrez García reservó una finca en la vía a Manizales bajo la modalidad “todos ponen”. La página de internet mostraba una finca espectacular con todos los servicios. Pero al llegar, los 30 miembros de la familia se decepcionaron. “La piscina, el jacuzzi, el sauna, nada funcionaba porque no había agua. A mi esposa y a mí nos tocó un cuarto amplio con una gran tina, pero no la pudimos usar. Escasamente bajaba un hilito de agua para la ducha. Y el 31, mientras todos se daban el Feliz Año, yo intentaba destapar el baño. Lo peor fue que pagamos $5 millones por cuatro días, sin incluir alimentación. Ese viaje fue el peor negocio”, dice uno de los familiares invitados.Ante ello, se recomienda no confiar en esos planes que prometen varios días en islas paradisiacas, cruceros con escala en los balnearios turísticos más famosos y con todo incluido y hasta premios, por solo unos cuantos dólares. Pues el sentido común dice que de eso tan bueno no dan tanto.Leer bien la letra menudaUn ejecutivo y su familia fueron de vacaciones a Europa. Para los trayectos en ese continente compró por internet tiquetes en Ryanr, una aerolínea de bajo costo que circula solo en países europeos. Pero el viajero no leyó la letra menuda donde le advertían que solamente se podía llevar equipaje de mano. Y en caso de tener equipaje de bodega, debe hacer ese ‘check in’ por internet también. Obvio. Cuando llegaron a abordar el vuelo, debió pagar recargos por llevar equipaje de bodega y también tarifa de servicio por el trámite de chequearlo en el ‘counter’. Así que los pasajes que en principio eran baratos, le resultaron caros, pues aunque todas las restricciones eran advertidas en la página, él nunca las leyó.María Fernanda Losada, viajera consumada, afirma que las entidades serias y legalmente constituidas siempre advierten de las condiciones o restricciones y ofrecen la posibilidad de reversar la compra. Otra garantía es mirar el ‘review’ de comentarios o voz a voz de la página web. Si hay más de dos o tres críticas o quejas de mal servicio, no compre allí. “Solo compro en páginas que tienen calificaciones y muy buenas, un buen indicador de confiabilidad. Y después también escribo mi experiencia de compra para que los demás usuarios la lean y tengan elementos para decidir”, dice Losada, una administradora de empresas que viaja por negocios.Derechos del turistaRecibir información veraz, clara, comprensible y suficiente en relación con el precio, beneficios, descuentos, cobertura, temporada (alta o baja) y si es del caso, de la renovación del servicio contratado.En caso de incumplimiento de los servicios ofrecidos o pactados, el consumidor puede escoger otro servicio igual, el reembolso o ejercer el derecho de Retracto, según Artículo 47 de la Ley 1480 de 2011 del Estatuto del Consumidor. O Interponer su reclamo o denuncia ante la Superintendencia de Industria y Comercio.Recomendaciones- Verifique que el prestador del servicio turístico, si es en Colombia, está inscrito en el Registro Nacional de Turismo y en el Registro Único Empresarial y Social, RUES, administrado por las Cámaras de Comercio.- No olvide preguntar sobre los diferentes planes vacacionales según su presupuesto, lugar de destino, número de personas, valor por noche, transporte y beneficios incluidos (comida, bebidas, actividades lúdicas, zonas húmedas, snacks, entre otros).- Compare los servicios que le brinda el mercado. Evalúe de manera consciente las ofertas del mercado, haga la compra en empresas con respaldo y realice todas las consultas pertinentes antes de hacer la transacción.Más consejosLa página web que empieza por las letras https es indicador de que es legal. La letra s al final significa que el dueño del dominio pagó un protocolo de seguridad, (Secure Sockets Layer) que la identifica como página segura.El ícono del candado cerrado que antecede las letras https o que aparece abajo, al lado derecho, identifica la página como segura.Para mayor seguridad, se aconseja no entrar a páginas enviadas desde un mail o traídas desde un buscador. Una página falsa presenta errores de gramática y ortografía recurrentes que no son usuales en otras páginas. Hay que tener mucho sentido común. Rechace los correos que brindan ofertas atractivas a un destinatario genérico como “estimado cliente”.