Vea el recorrido de Francisco Piedrahíta en la reserva natural en la que estuvo extraviado

El Parque Natural Jean Lafitte, en Nueva Orleans, es una zona de vegetación tan densa, que perderse equivale a estar un paso de la muerte. Vea aquí cómo es el territorio en el que sobrevivió.

Ni estando sumergido dentro de un pantano en suelo extranjero por casi cinco días, Francisco Piedrahíta, rector de la Universidad Icesi, dejó de trabajar. Así lo contó, en exclusiva para El País, Esteban Piedrahíta, el hijo mayor del académico. Los pormenores que le contó su padre sobre cómo vivió las 96 horas que duró extraviado. Por ejemplo, Esteban comenzó explicando cómo fue que el doctor Piedrahíta se perdió en el Parque Nacional Jean Lafitte."Lo que pasa es que mi papá dice que el mapa que le dieron no era un mapa muy completo. Estaba mal en ciertos aspectos. Indicaciones básicas. Él siguio algunas instrucciones buscando el Wood Duck (pato joyuyo) que era el pájaro que estaba buscando, entonces él llegó a lo que pareció el final del camino y cuando se dio cuenta estaba bien metido en el pantano. Cuando trato de devolverse no encontraba cómo regresar. Entonces se puso a caminar, pero ya estaba perdido y el lodo era muy espeso"."Caminó un rato, estaba exhasuto y decidio quedarse quieto. Se quedó como en un promontorio entre un par de árboles un tiempo, sabía que tenía que conseguir agua. Se quedó ahí a pasar la noche como en una islita. Sabía que podía quedarse deshidratado", contó Esteban Piedrahíta.La virtud de saber esperar, esa que sólo llega con los años, fue la que mantuvo tranquilo a Francisco Piedrahíta. El rector confió en su buena suerte, según dice Esteban. "Ya el domingo él estaba confiando que el taxista que lo había llevado al parque había avisado sobre su desaparición. Ese mismo día, cuando comezó la operación, oyó un perro y a un tipo. Él pensó que lo estaban buscando. Le gritó pero parece que el tipo no lo escuchó".El hijo del rector confirma que Francisco Piedrahíta se alimentó comiendo "pastico". También expresó que el doctor Piedrahíta, con el rigor de un buen reportero, "hizo anotaciones de todo" con lo que "podría hacer un reportaje muy completo sobre su situación para salir del pantano".Además "tomó fotos sobre su propia situación", sostuvo Esteban. "Incluso estuvo haciendo anotaciones sobre un artículo que tiene que escribir sobre la educación con ánimo de lucro. Estuvo trabajando en eso".Según Esteban, el rector nunca entró en pánico: "Mi papá es muy tranquilo y nunca pensó que iba a morir. Le preocupaba la deshidratación. Por eso todo el tiempo estuvo quieto y tranquilo, pensaba que como el lugar es tan pequeño lo iban a encontrar fácil". Contrario a la sapiencia de su papá, Esteban acepta, con la franqueza que da la calma tras la tormenta, que él sí temió por la vida de su padre. "Sí, llegué a temer lo peor. Uno pensaba "si está en la parte seca, él sale porque esto no es tan agreste". La verdad no me imaginé que estuviera en el pantano. No me imaginé que estaba allá. Me conmovían mucho era cuando me preguntaban por él, del por qué la gente lo quiere tanto"."Una vez pasó un helicóptero sobre mi papá, él se movió pero no lo vieron. Ya el lunes y el martes no sabía nada de la búsqueda. No sintió nada. Estaban como buscando pero él no sabía nada. Él oía una autopista cerca pero no podía moverse. Estaba con pocas energías ya que en las noche no podía dormír por los mosquitos" dijo Esteban, quien prosiguió explicando por qué fue que la búsqueda de su padre se extendió por tanto tiempo. "Hoy decidió moverse del sitio donde había estado. Quizá estaba pensando que el tiempo se le acababa. Lo que él no sabía era lo grande que fue el operativo que se estaba desarrollando para encontrarlo. Nadie se imaginaba que estaba tan cerca del sendero porque la verdad fue que lo buscaron por ahí. Lo buscaron al lado de los senderos donde podía estar pero no pensaron que él se podía haber ido mucho más allá. Mucho más allá, en una zona muy apartada, donde el pantano es complicado. Entonces empezaron a enfocar la búsqueda en otro lado, por la parte más seca del Parque Natural, viendo que realmente él estaba era al otro lado".Cuando se le pregunta a Esteban sobre la salud del doctor Piedrahíta y sobre cuándo volverán a Cali, no vacila. "Él no tenía ningún entrenamiento especial de supervivencia. Afrotunadamente siempre ha sido una persona muy sana. Goza de buena salud. Está muy lúcido y de muy buen humor. Yo ya compré los pasajes de regreso a Cali para mi familia, para este sábado... Quizá ese día estaremos en con mi papá allá".Por último, Esteban Piedrahíta, quien en declaraciones a la cadena estadounidense Nola había afirmado que "los peores animales que mi papá se encontró fueron los mosquitos" porque ni siquiera vio a los cocodrilos que tanto se mencionaron, comentó sobre aquello que lo desencadenó todo. Al final y después de cinco días dentro del pantano, Francisco Piedrahíta no pudo hacer aquello que le dijo al taxista, le demoraría 25 minutos: "No alcanzó a tomar la foto que estaba buscando. La foto de la 'Wood Duck' hembra ya la había tomado el viernes. El pato macho no estaba".