El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Cali

Artículo

Tres extranjeros unidos por el arte de los títeres

Una italiana y dos brasileños son los invitados especiales en el Festival Internacional de Títeres de Cali. Ellos hablaron sobre su oficio y los montajes que tienen preparados para ser presentados en la ciudad.

28 de abril de 2011 Por: Redacción de El País

Una italiana y dos brasileños son los invitados especiales en el Festival Internacional de Títeres de Cali. Ellos hablaron sobre su oficio y los montajes que tienen preparados para ser presentados en la ciudad.

Eran sólo tres, pero parecían una torre de Babel por la diversidad de nacionalidades, de orígenes e idiomas: una es italiana residente en Francia y habla ‘itañol’ con dejos argentinos; otra es brasileña con ancestros árabes e italianos, que habla ‘portuñol’, y el tercero es brasileño, también con raíces en Italia.Sólo los une su condición de titiriteros, invitados al X Festival Internacional de Títeres de Cali, donde sólo se habla un idioma, el de la risa, y donde se hicieron viejos amigos apenas se conocieron.Son Elisabetta Potasso, de la compañía francesa Filles en Tropiques; Manoel dos Santos Cavalcanti, ‘Danilo’, y Natalia Siufi Rizzo, de Mamulengo da Folía, de Brasil.Ésta última es actriz callejera en Sao Paulo, investiga la cultura popular y escribe crítica teatral.Al hablar de sus maneras de trabajar, Elisabetta cuenta que hace “todo tipo de muñecos: títeres de figura, de mano, de guante, de dedo, también mano desnuda y objetos de mesa, animándolos. El espectáculo que trajimos tiene parte con guiñoles y todas nuestras obras son originales”. Por su parte, Danilo explica en portugués que “el mamulengo es un títere propio de Pernambuco, Recife, que es reconocida por su cultura popular”. Y Natalia complementa: “El mamulengo hace fuerte crítica social, porque las figuras representan realidades sociales”.Sigue Danilo: “Lo más importante del mamulengo es el juego, la improvisación. Por eso, el mamulenguero tiene humor particular, fino y de doble sentido”.Las de todos son vocaciones innatas, que los llevan a desafiar una vida difícil, como resume la italiana Elisabetta: “Todo el tiempo trabajo con títeres, sola o con grupos. Cuando tengo plata busco mis colaboradores. Pero en nuestro trabajo tenemos mucha suerte, aunque es muy duro, porque podemos conocer culturas muy distintas, como la colombiana”.Al preguntárseles si se puede hablar de nuevas tendencias en los títeres, como se habla en el teatro o en la música, Danilo dice: “La práctica de los títeres se ha perdido mucho porque los titiriteros están envejeciendo, pero los festivales sirven para que enseñen a los jóvenes que quieren seguir sus pasos”. Añade Natalia: “En América Latina hay fuerte acento político por la situación de los países. Entonces la práctica de los títeres contiene una crítica muy fuerte y por eso los curas expulsan los mamulengos de las iglesias y los tratan como si fueran brujos malos”.En cambio, “en Europa la tendencia es mezclar tradición con temas contemporáneos. Por ejemplo, hacemos el Pulcinella de la Commedia dell’Arte renacentista, acompañado con video y banda de rock”, explica Elisabetta Potasso. Y compara: “En América Latina el titiritero está escondido detrás de un telón, mientras en Europa está visible, desde hace unos quince años. Eso merma la magia, pero se explica en que en Europa se había perdido la tradición de los títeres y apenas ahora se está recuperando”.

AHORA EN Cali