Respaldan obras para el sur de Cali, pero piden que se cumplan tiempos y sin sobrecostos

Mientras persisten las dudas en el Concejo Municipal por las obras viales que se ejecutarán en el sur de Cali, habitantes de esta zona de la ciudad manifestaron respaldo a los proyectos, pero solicitaron que se cumplan los cronogramas y costos.

Las discusión surgió al interior de la Comisión de Presupuesto, donde se adelantó una jornada de participación ciudadana sobre el proyecto de acuerdo 048, mediante el cual la Alcaldía busca autorización para comprometer vigencias futuras por $91.000 millones de pesos, de los años 2018 y 2019, con el fin de iniciar la ejecución de las primeras obras que se desarrollarán con recursos de un empréstito. 

“Es de vital importancia la ampliación de la vía Cali - Jamundí, la gente de los municipios del norte del Cauca y de Jamundí, donde 150.000 personas diarias entran y salen a Cali, vivimos un verdadero calvario.
Esperamos que las obras se aprueben porque esto permitirá mejorar la calidad de vida”, dijo Adolfo Aponzá, habitante del municipio vecino.
Para el ingeniero Hugo Salazar, residente de la Comuna 22, desde hace diez años se vienen planteando las soluciones en movilidad que necesita el sur, que incluyen el desarrollo de vías como la Calle 11, la Calle 25 y las carreras 122, 125 y 127, entre otras.

“Lo que uno pide es que tengan racionalidad. Si esas obras (las que se plantean con el empréstito) van a ayudar que digan en qué y en qué tiempo. Lo que algunos concejales indican es que los diseños aparentemente no están listos, entonces no vamos a cometer el mismo error de las megaobras que fueron una cosa que no se hizo de forma organizada y ahí estamos con unos costos tremendamente altos”, señaló Salazar.

En esto coincide el concejal Diego Sardi, quien añadió que la Administración debe garantizar que las obras se hagan el tiempo estimado y con el presupuesto proyectado. Señaló el caso de la ampliación de la vía Cali - Jamundí, que tiene un tiempo estimado de 15 meses y una inversión cercana a los $62.000 millones.

“La ciudad no aguanta con otras megaobras, que digan que van a ser $62.000 y terminen siendo $100.000 o que digan que van a ser 15 meses y terminen 24, 36 o 46”, dijo Sardi.

A su vez, Guillermo Ulloa y Gabriel Gallego, otros habitantes de la Comuna 22, manifestaron que la ciudad también debe apostarle a un plan integral de movilidad.

“Con agrado recibimos las obras que ha acometido este gobierno, dado que los gobiernos anteriores olvidaron por completo la planificación de la ciudad. También tenemos que entender que la ciudad es un cuerpo dinámico que permanentemente está en evolución y las obras que se van a realizar tienen un impacto para un 10 % de solución del problema”, afirmó Gallego.

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Valentina Castaño, universitaria de la zona del sur, se sumó a las peticiones para respaldar el proyecto: “es demasiado abrumador saber que son las 7:30 a.m. y tienes clase a las 8:00 a.m. y estás a mitad de camino. El trancón que se forma en la vía Cali – Jamundí es horrible para llegar a la universidad, entonces debemos pensar en que esto (las obras) va a ser un cambio positivo para la ciudad”.

Para Ramiro Varela, otro de los ciudadanos que opinó durante la jornada, el “fracaso de las 21 megaobras” debe ser un referente para que no dar vía libre al proyecto en discusión. Recordó que en el 2013 se aprobaron vigencias futuras por $380.000 millones para terminar las megaobras al 2017: “No se cumplió ni en plata ni en obras”.

Entre tanto, el concejal Juan Pablo Rojas, miembro de la Comisión de Presupuesto, manifestó que una de las dudas que tienen respecto al proyecto es sobre la gestión de predial de obras como la Cali - Jamundí.
“Nos informan que son 66 predios a adquirir, lo que no queremos es que si uno de estos predios decide no vender o tiene algún proceso judicial en curso frene la obra, no queremos los problemas de la vía a Pance”, precisó.

Sobre las inquietudes, el secretario de Infraestructura Vial, Marcial Quiñones, aseguró que los proyectos que se piensan ejecutar están en fase III, “significa que cuentan con todo lo que se requiere para que se inicie una obra sin contratiempo y si faltan algunas situaciones sean de ajuste y se elaboran antes de empezar la obra”.

En cuanto al tema predial, Quiñones afirmó que tienen listo el proceso para adquirir los predios que necesitan.

“No voy a meterme a adjudicar proyectos que no estén en condiciones de ejecutar las obras porque eso implicaría un presupuesto mayor o menor, una cantidad de situaciones que le generarían problemas en el desarrollo. La idea es que si hay un ajuste sea mínimo”, concluyó.

El próximo sábado termina el periodo de sesiones extraordinarias del Concejo y antes de ese día se espera definir si el proyecto 048 es aprobado o no. Según el concejal Óscar Ortiz, ponente de la iniciativa, lo que buscan es resolver las dudas técnicas que en este momento les genera el proyecto, como el tema predial, permisos arqueológicos y ambientales.

Asimismo, el cabildante descartó que se estén poniendo trabas al proyecto y señaló que llevan nueve sesiones de estudio.

“Aquí se dicen muchas cosas, se dice que somos una piedra en el zapato, que nos oponemos, pero hemos demostrado a la administración y a la ciudad que somos una corporación estudiosa, responsable y que queremos adelantar los procesos paralelos a la ley. Si algún proyecto no ha sido aprobado en el Concejo ha sido porque le ha faltado motivación, porque le ha faltado legalidad, planeación”.

En mayo pasado el Concejo autorizó a la Alcaldía endeudarse por $194.500 millones para ejecutar 13 obras de infraestructura vial.

Actualmente se solicitan vigencias futuras para poder dejar contratadas las primeras cinco obras este año. Estos proyectos son: Ampliación de la vía Cali - Jamundí entre el río Lili y la Carrera 127; construcción de un puente vehicular sobre el río Lili; construcción de la Avenida Ciudad de Cali entre Carrera 80 y vía a Puerto Tejada; construcción de intersección a desnivel en la Carrera 100 con Calle 25, y mejoramiento de la vía a Cascajal.