Proyecto de recuperación del corredor del río Cauca ganó premio
El trabajo de un grupo de la Universidad de San Buenaventura de Cali y la CVC ganó importante reconocimiento en la Bienal Colombiana de Arquitectura y Urbanismo, en Cartagena.
El trabajo de un grupo de la Universidad de San Buenaventura de Cali y la CVC ganó importante reconocimiento en la Bienal Colombiana de Arquitectura y Urbanismo, en Cartagena.
Hace pocos días el trabajo que lideró el docente de la Universidad de San Buenaventura de Cali, César Augusto Londoño, fue reconocido entre los 95 que fueron presentados para concursar en la XXV Bienal Colombiana de Arquitectura y Urbanismo en Cartagena de Indias.
El proyecto Articulación de los instrumentos de Ordenamiento Territorial del modelo propuesto para el Corredor Río Cauca, dirigido por el también arquitecto y doctor en Urbanismo, recibió el Premio Leopoldo Rother en la Categoría de Ordenamiento Urbano y Regional.
En él participaron como asesores los profesores e investigadores de la Universidad de San Buenaventura Cali, la arquitecta urbanista Marcela Esther Falla Gutiérrez, asesora en instrumentos regionales, y el economista y magister en planificación Júber Galeano Loaiza, asesor económico.
El docente y director del proyecto le contó a El País los detalles de un trabajo innovador que hace un aporte a la discusión del ordenamiento territorial y ambiental del departamento.
¿En qué consistió el trabajo desarrollado por el equipo de la Universidad de San Buenaventura de Cali?
Es un proyecto que hicimos en convenio con la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, CVC, de cooperación técnica y académica que firmamos en 2014.
Conformamos un equipo de trabajo en la Universidad de San Buenaventura de Cali para revisar todos los instrumentos de planificación ambiental y territorial en el espacio del Corredor Río Cauca (un territorio de 2645 Km2, enmarcado en la cuenca alta, con un recorrido lineal del río de cerca de 250 Km que integra espacial y funcionalmente los departamentos de Cauca, Valle del Cauca y Risaralda), que empezó a construir unos estudios técnicos muy interesantes a partir de las inundaciones de 2010 y 2011.
Lo que busca el proyecto es ver si se puede concebir una nueva forma de convivir con el río Cauca en el territorio, y si devolviendo un poco de espacio al río, integrando el sistema de humedales y madre viejas que han sido arrebatados al fluvial por construcciones e industria, puede vincularse nuevamente el río para recuperar su comportamiento con esos espacios.
¿Es un trabajo estratégico o se desarrollaron proyectos arquitectónicos?
Es un ejercicio que da unas directrices para que se incorporen los ordenamientos ambientales y territoriales.
Tiene varios componentes. El primero es la valoración de todos los instrumentos y aspectos jurídicos, el segundo es una articulación de los instrumentos a través de una estrategia que permite hacer lo que es la zonificación del territorio.
No son solo estrategias, sino que quedan territorialmente trazadas las formas en que se deben resolver las incorporaciones ambientales, de asentamiento, recomendaciones para las zonas agrícolas y urbanas.
Todo esto para las 264.000 hectáreas que componen el corredor del río Cauca.
Por último, hay una fase en la que se hacen unos prediseños de seis proyectos estratégicos para el recorrido del Corredor.
¿En qué consisten esos proyectos?
El primero es en Risaralda, le apunta a fortalecer el puerto turístico que tiene el municipio de La Virginia, un desarrollo en el que no se ha tenido en cuenta los espacios vecinos al otro lado del río, en Caimalito, Pereira. Por medio de este se puede hacer una integración de dos malecones sobre el río y construir un espacio ribereño para el turismo.
En Cartago, el proyecto tiene como finalidad potencializar el antiguo puerto fluvial, uno de los más importantes en la década de los 80 del siglo XIX. Busca aprovechar las obras de infraestructura que se van a desarrollar ahí que pueden generar oportunidades importantes para el turismo y la expansión urbana.
En el Distrito Agrícola (La Unión, Roldanillo, Toro) se busca trabajar destacando sus formas tan distintas de apropiación del territorio, a escalas diferentes a la industria de la caña. Ahí se busca generar factores de riqueza natural.
La Laguna de Sonso http://www.elpais.com.co/elpais/medio-ambiente/fotos/imagenes-asi-luce-laguna-sonso-tras-recuperacion-hecha-por-cvc está en el centro del Corredor y de la regulación natural. Ahí, los ordenamientos territorial y ambiental se pueden fundir en un proyecto de centralidad y logística para la región.
En la zona metropolitana lo que se busca es construir la orilla que da al río. Cali históricamente ha construido una mala orilla hacia el fluvial porque están las zonas más pobres y segregadas, en las que están ubicadas fábricas y plantas de tratamiento. Hay una oportunidad en el espacio comprendido desde la desembocadura del río Cali hasta la del río Yumbo para armar un frente urbano realmente respetuoso con el río, pero que valore toda esa calidad ambiental que puede conocerse allí. Hacer y construir un ejemplo territorial de lo que puede ser un frente de esta arteria fluvial es el objetivo.
En la zona sur, en el norte de Cauca que limita con Jamundí, se pretende entender cómo hay sistemas productivos que pueden convivir con lógicas naturales como los humedales y las madre viejas que huyen a tener una sola forma de producción y extracción en el territorio, ya que en la misma zona se unen los métodos ancestrales de extracción y los industrializados en perfecta convivencia. De ahí se pueden tomar ejemplos prácticos de cómo puede construirse la paz en un proyecto territorial. http://www.elpais.com.co/elpais/valle/noticias/investigacion-asi-han-arrasado-humedales-valle
¿Cuáles son los instrumentos que se articularon para desarrollar el proyecto?
Los POT de los municipios ribereños del Valle del Cauca, Cauca y Risaralda. Todo municipio que tuviera una frontera con el río Cauca está involucrado en el proyecto.
También se incluyen los Planes de Ordenamiento de la Cuenca y se le dan recomendaciones. Tener esos dos instrumentos que miran los municipios y las cuencas desde puntos distintos era el propósito central.
Se hicieron recomendaciones de articulación para los Planes de Ordenamiento Forestal de los tres departamentos, para las determinantes ambientales que deben complementar en los tres departamentos a partir de la zonificación del Corredor río Cauca.
También se dejaron algunas recomendaciones para los Planes de Manejo Ambiental de áreas naturales protegidas que son colindantes con el corredor.
¿Qué papel desempeña la academia de arquitectura en el proyecto?
La lectura territorial. No es la mirada clásica de unos instrumentos alejados del territorio, sino que tenemos la convicción de que el ordenamiento de calidad es el que hace lecturas territoriales, que no son solo estadísticas, sino que entienden la forma del territorio.
Los POT en general tienen grandes deficiencias jurídicas, económicas, documentales, pero la principal es la lectura territorial alejada de la realidad.
Si no existe una lectura de los territorios mucho menos se puede pretender transformarlos.