Mensajes contra Rodrigo Guerrero aumentan la guerra sucia por la Alcaldía de Cali

En varias vías de la ciudad se vieron carteles con información que pretende desprestigiar la campaña del candidato independiente. Las autoridades investigan el origen de esta guerra sucia.

Una nueva manifestación de 'guerra sucia' en la contienda política por la Alcaldía de Cali se evidenció este lunes, cuando varias calles de la ciudad amanecieron inundadas de elementos publicitarios con contenidos que denigran la campaña del médico Rodrigo Guerrero Velasco.Pasacalles, afiches y graffitis con mensajes que lo tachan de "corrupto" y "ladrón de firmas", fueron instalados en sitios de alto tráfico vehicular y peatonal como el puente de la Autopista Suroriental con Calle 15, la Calle 18 con carrera 23, el puente de la Autopista Suroriental con calle 25 y el puente peatonal de Siloé.Representantes de la campaña de Guerrero aseguraron que el hecho ya se encuentra en manos de las autoridades, junto a otras manifestaciones de publicidad oscura y desleal contra la campaña del exalcalde.Entre otras, mencionan acciones de desprestigio en medios de comunicación escritos, radiales y virtuales, en los que se ha publicado información falsa como la supuesta renuncia del candidato y resultados de encuestas no permitidas.La campaña de Rodrigo Guerrero denunció, además, que en sectores populares de la ciudad se tienen identificados sitios donde se están imprimiendo volantes con información que pretende desprestigiar la imagen del candidato independiente.Según conoció El País, las autoridades ya tienen indicios de los lugares en los que se contrató la impresión de la propaganda que fue instalada en la madrugada del lunes, así como sobre los autores de esta campaña de desprestigio, y se esperan acciones judiciales en los próximos días.Pero ¿porqué cada que inicia una contienda electoral en Cali se producen hechos como estos?Para el exprocurador ambiental y analista político Alberto Ramos Garbiras, las campañas políticas en Cali, como en muchos otros lugares del mundo, no se ganan hoy con ideas sino destruyendo la reputación de los adversarios."Los manuales de estrategia política dicen que los oponentes acuden a estas artimañas cuando no tienen más argumentos para deliberar ni discutir ideas", asegura Ramos, y añade que "esta es la opción que queda para desprestigiar a los rivales que están mejor posicionados".El analista dice que la muestra está en los ataques que se hicieron contra el candidato del Partido Liberal, Sigifredo López, cuando se dijo que su campaña era financiada por una organización al margen de la ley, justo en el momento en que estaba punteando en las encuestas. "Esos ataques se detuvieron cuando Sigifredo bajó en la intención de voto y se trasladaron a Guerrero, que empezó a repuntar. No es para nada una coincidencia", manifiesta.Por su parte, el abogado y exconcejal de Cali Victor Hugo Vallejo dice que la capital del Valle tiene una particularidad frente a las campañas de otras ciudades como Medellín y Bogotá, "y es que aquí el que gana no es el que mejores ideas exponga sino el que menos daño reciba de sus contrincantes"."No tendría nada de raro que los que hoy tratan de opacar a Guerrero con este tipo de campaña sucia tuvieran que ver con las firmas falsas y de muertos por las que casi pierde su candidatura", señala Vallejo.Alberto Ramos Garbiras sostiene que "en las últimas seis semanas se ha perdido el tiempo de la campaña descalificando la labor de otros, lo cual impide que el debate se centre en las propuestas de los candidatos y las nuevas políticas públicas que piensan desarrollar"."Esto que está pasando es un mal indicador sobre lo que va a pasar en el próximo gobierno, en caso de que el ganador sea quien está realizando las jugadas sucias. Así mismo va a ser su alcaldía", sentenció Ramos.