Las 'trampas' del MÍO para los discapacitados
¿Por qué ya no funciona el sistema que facilita el acceso de sillas de ruedas o coches? Lea lo que responde Metrocali.
¿Por qué ya no funciona el sistema que facilita el acceso de sillas de ruedas o coches? Lea lo que responde Metrocali.
Sillas de ruedas, bastones, muletas, caminadores y hasta coches terminan yéndose por el espacio que queda entre los buses y las estaciones del MÍO, cuando los vehículos arriban por los pasajeros. Así lo relatan algunos usuarios con movilidad reducida, que hacen uso del sistema de transporte masivo.
Es por eso que líderes de estos colectivos, como Andrés Higuita, le piden a Metrocali que para las próximas tareas de mantenimiento que se realizarán en cada una de las 56 estaciones del MÍO y que costarán más de $2000 millones, se tengan en cuenta las recomendaciones que se hacen en el último informe sobre el estado de las estaciones de parada y espacio público, realizado por el mismo Metrocali.
Dicho informe, de julio del 2011, hace hincapié en que la banda polarix (que hay en la actualidad) presentaba desprendimiento prematuro por fatiga de materiales y fallo propio del sistema de aproximación. La banda a la que se hace referencia es la que permite que haya empate entre los buses y las estaciones y está instalada en cada una de las 56 las estaciones del MÍO, para que los pasajeros aborden los articulados.
En el mismo reporte se precisa que la banda polarix representa un riesgo muy alto para los usuarios del sistema, pues su porcentaje de accidentalidad es del 28%.
Para intentar dar solución a este problema, Metrocali instaló durante tres años el sistema de aproximación banda bras en la estación Tequendama, lo que fue un piloto. Este sistema cuenta con rodillos para un mejor acercamiento y rodamiento de los buses en el momento de hacer su arribo a las estaciones. Al cabo de tres años lo retiraron.
De acuerdo con Metrocali, el contrato que se va a ejecutar solo es por concepto de mantenimiento, por lo que cambiar a otro tipo de bandas de aproximación no está contemplado.
Se va a cambiar la banda por la misma. Simplemente es mejorar lo instalado, dijo Paola Varela, jefe de gestión social de Metrocali.
La funcionaria enfatizó en que ya se está trabajando con los operadores de los buses para que maniobren los vehículos de tal forma que no quede espacio entre los articulados y la estación, evitando poner en riesgo a los usuarios. Además afirmó que en el centro de contacto no se han recibido quejas sobre este problema.
Según Andrés Higuita, instalar el mismo sistema es insuficiente y riesgoso para la población con discapacidad.
Es aterrador que Metrocali, después de haber hecho este informe de acuerdo con los recorridos que hicieron en 52 de las 56 estaciones, se empeñe en seguir invirtiendo en las bandas que no solucionan el problema, sin importarles el alto nivel de accidentalidad que hay.
José Francisco Cortés se moviliza diariamente en el MÍO en su silla de ruedas y aseguró que al sistema se le han hecho ajustes razonables, pero no suficientes. Afirmó haber tenido tres accidentes al abordar el MÍO en las estaciones.
Patricia Paz, profesional especializada en arquitectura incluyente, afirmó que Cali no tiene un plan municipal de accesibilidad y que sin él es muy difícil que la ciudad sea pensada realmente para esta población. Es un problema estructural.