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“La crisis del MÍO no es culpa del colectivo”: voceros de buses tradicionales

Voceros de los transportadores del sistema tradicional dicen que las empresas los envían a prestar servicio en rutas canceladas.

21 de febrero de 2013 Por: Zulma Lucía Cuervo Plazas, periodista de El País.

Voceros de los transportadores del sistema tradicional dicen que las empresas los envían a prestar servicio en rutas canceladas.

Los operadores del MÍO (dueños de los buses) y la Secretaría de Tránsito señalan como una de las razones de que el masivo de Cali no haya podido alcanzar su estabilidad económica a la permanencia en el servicio del transporte tradicional, incluso en rutas que fueron canceladas por la Administración local. Los presidentes de Asotranscali y Asoprotrans (que reúnen a propietarios de 1500 buses del sistema colectivo), Alexis Guevara y Miguel Ángel Victoria, respectivamente, aseguraron que la reducción de su oferta no se ha dado porque los operadores no están comprando estos vehículos. Agregaron que las empresas que aún siguen habilitadas (con permisos) despachan los buses en rutas que están canceladas.¿Por qué no aceptan la oferta que les hacen los operadores para vender sus vehículos?Alexis Guevara: Actualmente no tenemos ninguna oferta. Blanco y Negro Masivo paró las compras hace un mes. GIT sí está comprando, pero nos está ofreciendo $60 millones por una buseta con su cupo y aunque la Alcaldía dijo que el compromiso de los operadores era pagarnos de contado, eso no sucede porque GIT entrega inicialmente $20 millones. Conozco casos de compañeros que vendieron el carro desde septiembre y no les han terminado de pagar.Miguel Ángel Victoria: La Administración ha salido a los medios a decir que los operadores están pagando $95 millones o $100 millones por cada buseta, si fuera así, ya estaríamos haciendo cola. Pero el Alcalde siempre dijo que el pago sería de contado...A.G: Sí, lo hablamos en las mesas de negociación y es lo más humano que pueden hacer porque no se puede sacar a la gente de un negocio y no definirle rápido el pago cuando de esa buseta se sostiene, como mínimo, una familia que necesita saber en qué nuevo negocio se va a ganar su sustento diario.¿Qué pasó con esas mesas? A.G: Tuvimos cuatro reuniones (con operadores, la Alcaldía y dueños de las busetas tradicionales) y no llegamos a acuerdos. La Administración las levantó de manera unilateral y decidió no volverse a sentar a hablar con los pequeños transportadores de Cali. Este año hemos solicitado reanudarlas porque creemos que ese es el espacio para solucionar las diferencias de precios que tenemos entre los operadores y el transporte tradicional. Pero es que en esas discusiones, como ustedes mismos admiten, nunca llegaron a acuerdos...M.A.V: Cuatro conversaciones no son suficientes para un tema tan delicado, donde está de por medio el sustento de las familias propietarias de los buses. La Administración dice que esos buses sin tarjeta de operación salen a las calles como ‘piratas’...A.G: Pues no faltará uno que otro que tiene su tarjeta de operación vencida y sale a rebuscarse la comida, pero son contados con los dedos de la mano. La mayoría de buses que usted ve en las calles tienen su tarjeta de operación vigente y sus seguros al día. La Administración ha sido clara en manifestar que la compra de los buses es un negocio entre privados...A.G: Sí, es cierto, pero ellos están mediando a favor de los operadores porque cancelaron rutas y la habilitación de las empresas donde estaban afiliados los buses como mecanismo de presión para que les vendamos los carros a los operadores del MÍO a cualquier precio. Lo que están haciendo es ponernos en bandeja de plata, el pez grande se está comiendo al pequeño y cuando ellos quieren. Los transportadores, en medio de su necesidad, venden por lo que les digan. La situación es tan crítica que 200 propietarios de 260 vehículos tienen guardados los carros hace más de cuatro meses. Y créame que ya no estamos dispuestos a aguantar más.Ustedes proponen que les compren los buses en $200 millones o $300 millones. ¿No es exagerado para unos vehículos que tienen más de una década de servicio?A.G: Nosotros bajamos esos valores en aras de poder negociar. La propuesta actual oscila entre los $90 millones y $140 millones, dependiendo el modelo y la tipología del vehículo. M.A.V: Mire como son las inconsistencias del gobierno, mientras las busetas estuvieron en nuestro poder sí eran chatarras, chimeneas ambulantes, carros que no servían, pero ahora que esos vehículos están en manos de los operadores, sí los quieren pintar de naranja y ponerlos a trabajar recogiendo a la gente en la calle y llevándola a las estaciones. El Tránsito los acusa de hacerle paralelismo al MÍO...A.G: Le cuento, empresas como Coomoepal, donde es socio Ramiro Jurado, que también participa en el MÍO, nos despachan por rutas que están canceladas. Le traje una boleta de despacho del lunes pasado con sellos de la empresa y con control de tiempo (Ver facsímil). Los operadores quieren crear una cortina de humo diciendo que la crisis financiera del MÍO es culpa del colectivo y de la Administración porque no saca los buses tradicionales, pero el Conpes y las resoluciones del Tránsito dicen muy claro que los operadores tienen que comprarnos los buses. Nosotros no nos oponemos al sistema ni al desarrollo de la ciudad, pero no podemos salir a aguantar hambre, lo que pedimos es que nos compren el negocio. La estrategia actual es atacar los buses, pero el Tránsito no hace nada por combatir la piratería, que se creció un 300 % y mueve entre 250.000 y 300.000 pasajeros. Eso se puede corroborar haciendo un recorrido por la Avenida Ciudad de Cali, por la Avenida Simón Bolívar, por la Calle 5, para que vean las filas de carros recogiendo gente. M.A.V: Esas cancelaciones de rutas están viciadas porque solo se podían cancelar cuando los operadores compraran los buses del colectivo, por eso solicité una investigación en la Procuraduría para que se revisen las actuaciones de los funcionarios de Metrocali y del Tránsito.Ustedes se reunieron con el Viceministro de Transporte, ¿qué le pidieron? M.A.V: Que sea garante en el proceso de negociación con los operadores, queremos establecer unas tablas de chatarrización tal como sucede con el Transmilenio en Bogotá, no entiendo por qué en Cali no es posible hacerlo. A los operadores del MÍO les parece muy oneroso comprar un bus en $120 millones cuando en Bogotá, por una buseta modelo 2005 pagan $147 millones. También le pedimos que mientras se implementan todas las rutas del MÍO nos dejen trabajar en unas rutas donde no le hagamos paralelismo al sistema masivo. Quedamos en volver a vernos la próxima semana porque estamos buscando el diálogo.Pero en los buses se ven unos carteles que indican una ‘hora cero’. ¿Están preparando un nuevo paro, como el de septiembre pasado?M.A.V: Por ahora estamos buscando una salida negociada y por eso hemos pedido que se reanuden las mesas de negociación, pero la gente se cansa de esperar.¿Cuánto van a esperar? M.A.V: Una acción ocasiona una reacción, no le puedo decir si será mañana o en un mes. Por ahora esperamos que el Viceministro sirva de garante en el diálogo.

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