'Gandalf', el can que se jubiló con honores en la Fuerza Aérea

Su nombre es ‘Gandalf’, un perro antiexplosivos que dedicó casi toda su vida a prestarle servicio a la Fuerza Aérea. Llegó al lugar hace 10 años y ayer, en medio de una grata conmemoración, se jubiló.

Desde su llegada se dieron cuenta de su gran capacidad olfativa, fue por eso que decidieron que apoyara labores de detección de explosivos y operaciones de allanamiento y control a vehículos en carreteras.

El perro viene de la Subdirección de Caninos Militares de la Fuerza Aérea, ubicada en Madrid, Cundinamarca. Allá nació y se entrenó. Sin embargo en Cali se le hizo un refuerzo más. Ahora, en la Base Aérea todos los días se hacen entrenamientos con muestras reales de explosivos y el canino siempre lidera esas pruebas. Fue el animal en el que más confiaban cuando salían a hacer operativos con la policía.

El técnico tercero, Jeferson Perafán Suárez, de la sección Canina de la Fuerza Aérea, fue quien estuvo todos los días guiando la labor de 'Gandalf'. Y era él, quien siempre recibía al Técnico Tercero con un gran salto y abrazo. Ahora, con su despido, el funcionario seguirá entrenando a los otro siete perros de detección de explosivos, dos de narcóticos y cuatro caninos de seguridad.

Por su quehacer pareciera que debería ser un perro ‘bravo’, pero es todo lo contrario: noble y cariñoso. En el transcurso de su trabajo, se destacó por la energía que siempre llevaba.

Sin embargo, esa energía lo llevó, en el 2013, a caerse mientras saltaba de un vehículo que estaba registrando y tuvo una ruptura de ligamento en su parte trasera. Y hasta hoy no se encuentra del todo bien, pues sigue caminando cojo.

Esto no fue un impedimento para él, pues con 12 años de vida sigue corriendo por las calles de la Base Aérea Marco Fidel Suárez.

A pocos días de irse de la casa que lo recibió, ‘Chandalf’, como cariñosamente lo llaman, recibió una condecoración por ser el canino más destacado en la identificación de explosivos.