En el limbo, prolongación de la Calle 16 en el sur de la ciudad

Según el Dagma, el puente elevado sobre el río Meléndez, que unirá las carreras 83 y 80, podría poner en riesgo a los habitantes de la Comuna 17 debido a inundaciones de grandes proporciones.

La prolongación de la Calle 16 en el sur de Cali está en el limbo. La construcción del puente elevado sobre el río Meléndez, con el que se unirán las carreras 83 y 80, no podría llevarse a cabo porque, según la autoridad ambiental de la ciudad, aumenta el riesgo de inundaciones en diferentes sectores de la Comuna 17.Así lo aseguró Efraín Sierra, director del Departamento Administrativo de Gestión Ambiental, Dagma, al señalar que los diseños presentados por el consorcio Vías de Cali SAS, encargado de desarrollar el proyecto, no cumple con los requisitos necesarios para evitar un inminente represamiento del afluente.Cabe recordar que dicho consorcio actualmente está encargado de la ejecución de obras de la Zona Sur de Cali pertenecientes al paquete de las 21 megaobras, en el que se incluye la construcción del puente para prolongar la Calle 16.La entidad ambiental del Municipio emitió el concepto desfavorable luego de realizarse un estudio de modelación hidráulica del río Meléndez en el que se evidencia el impacto negativo de los puentes ubicados sobre cinco puntos al paso del afluente, que por su diseño provocaron inundaciones en la ola invernal pasada.Según las normas de construcción, el puente de la Calle 16 deberá elevarse sobre el río a un metro de distancia de la cota máxima de inundación (para el río Meléndez es de 9.68 metros sobre el nivel del mar). Sin embargo, el diseño presentado por Vías de Cali SAS estipula una altura máxima de 45 centímetros sobre el nivel del río en su cota máxima de inundación. “El consorcio debe presentarnos un diseño que garantice que no se presentarán inundaciones”, manifestó Efraín Sierra.Dilemas de ingenieríaRepresentantes del Consorcio Vías de Cali se mostraron en desacuerdo con el concepto del Dagma, argumentando que el diseño presentado para la construcción se ajusta a todos los parámetros técnicos.Juan Pablo Córdoba, director de proyectos del consorcio, argumentó que los 45 centímetros de altura propuestos para el puente se estimaron teniendo en cuenta las pendientes de elevación de los cuatro carriles que servirán como pretroncales para el Sistema de Transporte Masivo, MÍO.En ese sentido, técnicos de la firma constructora explicaron que con esa altura los carriles del puente no superarán los 12 grados de inclinación, permitiendo el fácil ingreso para los buses padrones del Masivo. Para complementar el acceso al puente será necesario aumentar en 70 centímetros la altura de las carreras 83 y 80 con mezcla asfáltica. Sin embargo, advirtieron que si la altura del puente se aumenta a un metro de las aguas del río las pendientes serán muy inclinadas y ni los buses del MÍO o cualquier otro vehículo podría subir el puente.Lo complicado del asunto, aseguran los ingenieros, es que para lograr un balance en los carriles, con el puente a un metro de altura, tal como lo exige el Dagma, las carreras 83 y 80 tendrían que elevarse a 1.70 metros, lo que dejaría enterrados barrios como El Ingenio y Prados del Limonar.“Esto es un problema gravísimo porque la vía quedará más arriba que las casas aledañas, les quitará espacio público, las expondrá incidentes e incluso los hará más vulnerables a inundaciones. Cambiar el diseño no tiene sentido porque terminaría perjudicando a la comunidad”, dijo el Director de Proyectos del Consorcio Vías de Cali SAS.Juan Pablo Córdoba anunció que el próximo lunes se reunirán nuevamente con el Dagma para entregar un estudio técnico que le da vía libre a la construcción del puente, tal y como está diseñado en la actualidad. Al respecto, Efraín Sierra, director de la entidad ambiental Municipal manifestó que “revisarán dicho estudio y si es viable podrán emitirse los permisos”.