Ellos son los caleños que trabajan por la conservación de los ríos
Estos son algunos ejemplos de grupos y personas que trabajan por la conservación de los ríos de Cali y que hoy en el día del agua es importante resaltar su labor.
Estos son algunos ejemplos de grupos y personas que trabajan por la conservación de los ríos de Cali y que hoy en el día del agua es importante resaltar su labor.
Mientras la mayoría se quedaron en la crítica, ellos tomaron acción. Algunos de manera solitaria recogiendo basuras que otros dejan, otros comprando un pedazo de tierra para convertirlo en reserva natural. También hay quienes tienen la convicción que la solución está en educar. Se trata de los caleños que trabajan por la conservación de los ríos y que de no ser por ellos la realidad de los afluentes, que aún cruzan vivos Cali, sería otra.
Un millón de árboles sembrados, es la cifra a la que se aproxima Amatea, una organización que lleva trece años en la restauración ecológica de cuencas de Cali. Nosotros buscamos recuperar el bosque con árboles nativos. Lo hemos hechos en las cuencas del río Cali y Pance, explica Andrés Sarmiento.
Agrega que es un trabajo que se realiza junto con Parques Naturales dentro de una metodología establecida. A pesar de los esfuerzos, Andrés piensa que la situación de la conservación de los ríos va para abajo, esta en decadencia, sostiene.
La familia Ángulo, en el corregimiento de La Castilla, es otro de los emprendimientos ambientales de la ciudad, ellos se han dedicado a proteger y conservar cuatro nacimientos de agua. Iniciaron hace 20 años y ahora cuenta con la única reserva natural de la comunidad civil en Cali a la cual llamaron La Laguna.
Buscamos es conservar la naturaleza. Ha sido una lucha para convertirlo en reserva natural. Aquí en Cali fue imposible, nos tocó ir hasta el Ministerio de Medio Ambiente para poder lograrlo después de la tramitología, dice Carlos Ángulo, una de las personas que impulsa esta iniciativa.
En dicho proceso esta familia invirtió cerca de $40 millones. La reserva tienen una extensión de 18.000 metros cuadrados en donde nacen cuatro nacimientos de agua, que después nutren al río Cali. Allí llegan varias universidades para conocer sobre la flora y fauna de los Farallones de Cali.
[[nid:519344;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/563x/2016/03/ep001103130.jpg;full;{La Laguna, es la única reserva natural de carácter civil que existe en Cali.Especial para El País.}]]
Cuando llegamos había mucha deforestación. Las quebradas no estaban dando ni una pulgada de agua pero se logró llegar a 4,5 pulgadas del cual se surten 120 familias del corregimiento la Castilla, sostiene Carlos.
La Asociación Río Cali es otro grupo de caleños que le apuestan a la educación para conservar el afluente. Es una organización que lleva 18 años en esta tarea. Nuestra propuesta es a largo plazo. Trabajamos con los niños de las instituciones educativas que están cerca a la cuenca del río Cali para formarlos cono guías de turismo. Ellos tenían la cultura de cazar pájaros con caucheras, nosotros les enseñamos a realizar avistamientos de aves y cómo identificar su trino, a protegerlos. De allí comenzamos a realizar educación ambiental, manifiesta Jenny Jordán presidenta de la asociación.
Carlos Wagner, también miembro, dice que su trabajo está enfocado en la sensibilización. Estamos convencidos que la única manera de proteger nuestros recursos es creando conciencia.
En Pance, el balneario preferido de los caleños, también hay quienes se preocupan por la conservación del río. Allí la Mesa Ambiental de Pance desarrolla varios proyectos y el de Walter Vega es uno de ellos. Nos dedicamos a la recolección, limpieza del río y educación ambiental. Somos una recuperadora de materiales de la zona rural de Pance, después del fin de semana por lo general los días lunes nos dedicamos a recolectar la basura que dejan los demás, comenta Walter.
Esta son tan solo algunos ejemplos de grupos y personas que trabajan por la conservación de los ríos de Cali y que hoy en el día del agua es importante resaltar su labor.
Experiencia regionalUna de las iniciativas regionales de protección de las cuencas hidrográficas se encuentra en el municipio de La Cumbre, corregimiento de Bitaco, donde se encuentra la única plantación de té en Colombia, allí esta establecida la reserva natural Himalaya, donde 100 hectáreas de bosque de niebla hacen parte de una valiosa franja boscosa considerada a nivel internacional como hot spot (punto estratégico) por ser una de las zonas más biodiversas del mundo y gran productora de agua. Esta zona es protegida por la Agrícola Himalaya, una empresa que practica la sostenibilidad ambiental. En estos bosques nacen aguas que surten a más de 15.000 habitantes de los municipios de La Cumbre y Dagua. En la reserva habitan 256 especies de aves, 28 de anfibios, 23 de reptiles, 28 de mamíferos, 772 de flora, entre las que se encuentran más de 150 especies de orquídeas.